Andar descalzo por el desierto de Marruecos
Quién lea este post, probablemente esté pensando en organizar rutas por Marruecos y conocer esta bonita tierra. Una de las mejores experiencias que puedes hacer, es andar descalzo por el desierto de Marruecos.
La que suscribe este post, es adicta al desierto de Marruecos, necesita descalzarse y sentir la arena bajo sus pies, no importa que sea invierno o verano, cuando llega al desierto, se va a pasear por las dunas con la necesidad de sentir ese océano de arena bajo sus pies, de disfrutar del silencio del desierto del Sahara.
Muchos pueden pensar que en el desierto del Sahara podemos tener compañía animal, y no estáis equivocados, puede haber escorpiones, víboras, etc., por eso, siempre se recomienda llevar pantalones largos y buen calzado para andar por el desierto, pero…yo soy de las que se resiste a renunciar al placer de andar descalza por las dunas y recorrer sus crestas.
Me gusta andar descalza por el desierto, al igual que cuando voy a la playa, me gusta poner los pies en el mar.
¿En qué momento andar por el desierto de Marruecos resulta complicado?
No todos los momentos que podamos vivir en el desierto del Sahara son relajantes, a veces puede ser realmente complicado dar un solo paso por las dunas, el causante de no poder andar por el desierto, es el viento del “Chergui”, un viento persistente, muy seco y polvoriento, capaz de paralizar la vida. Os aseguro, que el viento del “Chergui”, puede convertirnos en un segundo, en los protagonistas de una súper película de aventuras.
El polvo sopla por todas partes, la arena golpea tu piel y se forma una neblina que no te deja ver a un palmo de tu nariz, de ahí que los hombres del desierto lleven turbante, prenda imprescindible para entrar en el desierto.
Como dice Abdellatif Bouziane, un Blogger de Marruecos que escribe estupendamente bien, y del cual me encantó su descripción del viento del “Chergui”:
El “Chergui” es un gran compresor de realidades. Se enzarza afanosamente con todo lo que pilla y te aprieta, sin pausa y sin prisa, hasta que se ahoga. Siempre me ha fascinado su majestuosa presencia. No hay forma física, conocida por el ser humano, capaz de detenerlo en el tiempo.
Y…sus palabras son tan ciertas… que las comparto con todos vosotros.
¿En qué desierto en Marruecos se encuentran las grandes dunas de fina arena?
Desde la ciudad de Marrakech dan comienzo la mayoría de las excursiones para dormir en el desierto de Marruecos. Está la ruta al desierto de Agafay (es una meseta pelada sin arena); la ruta al desierto de Zagora (un desierto más bien pedregoso y muy turístico); la ruta al desierto de Chigaga (una ruta muy auténtica y con pequeñas dunas de arena) y después la ruta por Kasbahs y desierto que conduce al desierto de Erg Chebbi, el conocido popularmente, como el desierto de Merzouga, en cuyo lugar se encuentran las grandes dunas de finísima arena, ideales para andar descalzo por el desierto.
