En rutas por Marruecos, la Kasbah Amridil
Hacer rutas por Marruecos te va a dar la oportunidad de conocer numerosos caminos que recorren oasis, unos solos transitables con 4x4, otros en bicicleta, pero sin duda, descubrirás el lugar donde todavía existen fortalezas de barros, son las llamadas Kasbahs.
Para adentrarte en una de ellas, deberás conocer el sur de Marruecos, tierra donde el tiempo ha hecho mella, pero que nos da la oportunidad de conocer la vida en otros tiempos.
En el valle de Skoura existe el mayor número de Kasbahs, hay un total de 145 Kasbahs, aunque gran parte de ellas, se deshacen como terrones de azúcar y solo quedan vestigios de lo que un día fueron, pero aún así, merecen una visita.
¡Sin duda una de las más bonitas y mejor conservadas es la Kasbah de Amridil!
La Kasbah de Amridil data del siglo XVII, una maravilla de edificación de barro que se halla bien restaurada, aunque no es posible hacer la visita a toda la Kasbah, el núcleo principal permanece cerrado al público, limitándose la visita a un anexo, y a varios patios donde pueden verse numerosos objetos de la vida cuotidiana.
Lamentablemente he intentado escribir datos relevantes de esta preciosa Kasbah, pero no he encontrado material importante que explique nada de ella, es como si la historia se la hubiera tragado, o nadie tuviera un gran interés en su estudio, a mi modo de ver, es una lástima que ningún historiador se detenga en tal maravilla, solo sé de un escritor especializado en la arquitectura tradicional de tierra cruda, Roger Mimó, un catalán que vive en Marruecos desde 1962, que tras casarse con una marroquí, se dedicó a la escritura de estas fortalezas, defendiendo acérrimamente su tesis y creyendo de igual manera, la necesidad de una simbiosis entre el turismo y el patrimonio arquitectónico, porque si las kasbahs se mantienen en buen estado, se protegerá el patrimonio de la tierra y a la vez atraerá a turismo para hacer rutas por Marruecos.
La Kasbah Amridil, se construyó por orden de la familia Nassiri, y hoy en día sigue siendo la propietaria y la responsable del mantenimiento y su restauración.
Hacer la visita de la Kasbah Amridil es realmente gratificante, tendréis que pagar una pequeña entrada y un simpático guía os explicará historias y anécdotas de la vida de aquellos tiempos, ensenándoos utensilios y herramientas habituales del campo y de cocina.
En la visita guiada de la Kasbah Amridil, veréis espacios donde se cocinaba, espacios para el hammam, dormitorios…y ahí la gracia del que traslada la historia, un hombre de mediana edad…mirará a las mujeres y con una sonrisa bajo los dientes, dirá…tenía cuatro mujeres, jajaja.
Sin duda la terraza es uno de los lugares más bonitos, ofreciendo la sensacional panorámica del valle de Skoura.
Desde Dromedario Volador solo podemos decir que, si vais a hacer rutas por Marruecos y pasáis por el valle de Skoura, hacer una parada en la Kasbah de Amridil, porque os merecerá la pena, y desde luego, es mucho más bonita por dentro que lo que se ve desde el exterior.
¡Parad y disfrutad!