La seguridad en las medinas de Fez y Marrakech
A pesar de lo que muchos puedan pensar, la seguridad en las medinas de Fez y Marrakech está muy controlada. El gobierno de Marruecos prioriza ante todo la seguridad del turismo, ya que gran parte del país vive de ello y Marruecos es uno de los países musulmanes más visitado en todo el mundo.
Quien haga rutas por Marruecos, quizás no se percate de la seguridad que hay en las medinas, pero existe un gran dispositivo policial (policía secreta) que pasea por las callejuelas y los zocos, y la razón es siempre la misma, proteger al turista.
Sabed, que no cualquiera puede acompañar al turista por las medinas de Fez y Marrakech, es obligatorio que sea un guía oficial. ¿Y como saber que son guías oficiales? ¿Cómo los identificamos? Pues bien, llevan su acreditación colgada del cuello, a la vista de cualquiera.
En Dromedario Volador, cuando clientes nuestros hacen rutas por Marruecos, nos encontramos que muchas veces, los viajeros quieren que el conductor que les ha acompañado durante todo el circuito, sea él quien les guíe por la medina, o simplemente que les acompañe a pasear y eso lamentablemente no es posible, lo tienen totalmente vetado, y no por culpa de la dirección de la empresa, sino por la policía, si lo hacen, pueden encontrarse en un verdadero problema, incluso pueden acabar en el calabozo.
La seguridad en Marruecos para los turistas es algo que lo llevan a raja tabla, incluso en los aeropuertos extreman muchísimo las precauciones, sabed, que nadie que no vaya a coger un vuelo puede entrar en las instalaciones (únicamente el personal acreditado) y con controles exhaustivos de equipaje.
Entre la medina de Fez y la medina de Marrakech hay grandes diferencias, la de Fez es mucho más grande y complicada que la de Marrakech, es importante caminar por calles transitadas y nunca olvidar el sentido común.
Evitar las altas de la noche para andar por la medina, especialmente en Fez. Si quieres salir a cenar a algún restaurante en Fez, que esté apartado de tu Riad, es recomendable, para no decir imprescindible, que contrates un servicio de transporte para que te lleven y te vuelvan a dejar en el Riad.
La medina de Fez es inmensa, un gran laberinto, y no todos los barrios son recomendables, por lo que, si te gusta caminar sin rumbo fijo, puedes acabar perdido y lo que es peor, puedes acabar encontrándote en situaciones peligrosas.