Es recomendable hacer una excursión al desierto desde Marrakech?

A veces me sorprende leer opiniones de viajeros que han pasado por el desierto de Merzouga y no han quedado del todo contentos y entonces me pregunto...Porque será? Escogerían una agencia de viajes que no se implicara con su cliente, en busca de aquel viaje por Marruecos que él tenía en su mente o tendría la mala suerte de hacer una excursión al desierto en una época de muchos visitantes? Evidentemente, ir al desierto de Marruecos no es un complejo turístico preparado para grandes comodidades y posiblemente a veces nos sintamos incordiados por los niños del desierto y los hombres que vendan fósiles a los turistas, pero ahí, creo que debemos tener paciencia y ponernos en la piel de esas personas, pues la vida aquí es muy dura, con pocas oportunidades y empleos mal pagados. Los pobres camelleros que ahora recorren las dunas a diario, sobreviven gracias a la oferta turística de las excursiones al desierto, con sus pies descalzos y acostumbrados al calor de la arena, los cuales han sufrido una transformación radical en tan solo unos años, y se han visto envueltos en la modernización, con la influencia de los actuales medios de comunicación, en especial, la televisión e internet. Ya no son aquellos nómadas que aprendieron a ser pastores itinerantes, moviéndose con sus animales donde creciera la vegetación, ahora son supervivientes en un medio hostil, donde cada individuo relega el pasado a la nueva época.
Pero...hacer un viaje al desierto de Marruecos...Es sumergirse en el silencio de los grandes espacios, sentir el viento, reconocer los sonidos del campamento y el gruñido de los dromedarios que reclaman su libertad.
En un territorio tan inmenso como es el desierto del Sáhara, siempre hay donde ir con tranquilidad. No importa el lugar, sino ese latido indiscutible de inmensidad, de recogimiento, de libertad desmesurada. La belleza de tan gran escenario rebasa todo intento de descripción, y lo que de día deslumbra, con la magia de las estrellas adquiere densidad y volumen.
Pero lo que más une al Sáhara son las personas! Hoy, cuando ya no es necesario dar albergue al forastero, todavía creen en Venus como la estrella de los huéspedes y por ello la hospitalidad es norma y la ayuda es desinteresada.