Rutas por Marruecos - Visita indispensable en Rabat: Kasbah de las Oudaias (Udayas)
Quien esté de rutas por Marruecos, no debe dejar de hacer esta visita indispensable en Rabat: la Kasbah de las Oudaias.
Entre las muchas joyas que Marruecos tiene para ofrecer, hay rincones que parecen sacados de un sueño, y uno de ellos es, sin duda, la Kasbah de las Oudaias.
Situada en la capital del país, Rabat, esta antigua fortaleza es mucho más que un monumento histórico: es un viaje en el tiempo, un paseo entre callejuelas encaladas de azul y blanco, y una ventana abierta a la esencia más auténtica del Marruecos costero.
En este artículo te contamos por qué esta visita es imprescindible si estás recorriendo Marruecos, especialmente si lo haces en una ruta privada que te permita disfrutarla con calma, con todos los sentidos y sin prisas. ¡Acompáñanos a descubrir la magia de esta Kasbah!
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La Kasbah de las Oudaias es una antigua fortaleza que está en la parte más antigua de la ciudad de Rabat, situada en la desembocadura del Bu Regreg, el río que divide la ciudad de Rabat con su vecina Salé. En 2012 fue reconocida por la UNESCO, Patrimonio de la Humanidad, y es un lugar muy bello que ofrece unas bonitas vistas al río, y del mar.
A lo largo de su historia ha ido transformándose, pero debido a su situación estratégica a sobrevivido a lo largo de los años, su enclave privilegiado, dominando la desembocadura del río a hecho de ella un lugar emblemático de la ciudad de Rabat.1.JPG)
Paseo por la Kasbah de las Ouidaias (Udayas):
El paseo por la Kasbah de las Oudaias en un sitio pintoresco, un pequeño laberinto de callejuelas pintadas de blanco y azul, ideal para pasear, hoy en día es una zona residencial. La mayoría de las casas, fueron levantadas para los refugiados musulmanes procedentes de España.
La puerta más imponente y bonita de la Kasbah, es la de Bab Oudaia, construida en el siglo XII por los almohades.
Una vez nos encontramos ya en el interior de la Kasbah, la calle principal es la Rue Jamaa, que atraviesa la Kasbah entera. A pocos metros de la puerta de Bab Oudaia se encuentra la Mezquita Atiga, que es la más antigua de Rabat (Siglo XII).
En las calles hay las típicas tiendas pensadas para los turistas y alguna que otra galería de arte.
Continuando todo lo largo de la calle, llegaremos hasta la Plataforma du Sémaphore, con vistas al estuario y a Salé.
Su ubicación elevada, la hacía un lugar perfecto para la defensa, desde ahí, divisaban a cualquiera de sus enemigos y atacantes, que entraban por vía marítima.
Cerca de Plataforma du Sémaphore, se encuentran los Jardines Andaluces, diseñados en los tiempos del colonialismo francés y ocupan los terrenos del palacio.
El Palacio es un edificio del siglo XVII, uno de los primeros palacios construidos por Moulay Ismail, de la dinastía alauí, que todavía hoy reina en el país, en cuyo lugar, hoy en día se encuentra el Museo de las Oudaias, el cuál contiene una colección de joyas prehistóricas, románicas e islámicas.
Y después del paseo pintoresco por la Kasbah de las Oudaias, no hay nada mejor que sentarse en el Café Maurè, para disfrutar de un buen té con menta y de vistas espectaculares. .JPG)
Reserva y Contacto:
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