Rutas por Marruecos en diciembre
Las personas que vayan a hacer rutas por Marruecos en diciembre, piensan que no hace mucho frío, se imaginan un mono clima que durante el año tiene pocas bajadas y subidas de temperatura, y de eso nada, quien esté preparando ir al desierto de Marruecos en diciembre, tiene que ir bien equipado para soportar el frío, da igual que vayas a un campamento de lujo o estándar, el frío estará presente en ambos.
Las haimas de lujo, tienen wc y ducha y están decoradas de manera bonita, pero en su interior no hay calefacción. Últimamente, algún campamento de lujo, ofrece haimas con bomba de calor ( o sea, calefacción) pero...sabed, que el precio de la noche se eleva considerablemente, por lo que solo unos pocos acceden a pagar ese precio.
Los campamentos estándar, sus haimas son sencillas, sin ningún lujo, y la mayoría sin wc y no tienen calefacción.
En todos los campamentos encontraréis mantas, pero es recomendable llevar ropa térmica y cómoda, las temperaturas en el desierto de Marruecos en el mes de diciembre pueden llegar a 15º grados bajo cero.
Aquellos viajeros que hagan rutas por Marruecos con mochila en el mes de diciembre, si llevan un buen saco de dormir, lo agradecerán muchísimo, ya que un buen saco no tiene ni punto de comparación a las mantas de los campamentos.
En cambio, si lo que vais ha hacer, es una ruta por Marruecos, visitando ciudades como Marrakech, Fez, Casablanca, las temperaturas son más suaves, alcanzando los 23º grados diurnos y bajando hasta 8º grados por la noche. A la hora de contratar un Riad deberéis fijaros si disponen de calefacción en sus instalaciones.
En Marruecos, la mayoría de las estaciones hace calor o muchísimo calor y solo unos pocos meses son de frío, por lo que muchas casas no disponen de calefacción, pero depende de la ruta por Marruecos que vayáis a hacer, ir preparados y equipados, porque podéis acabar tiritando de frío. Recuerdo una ruta que hicimos por Imilchil, que… madre mía… que frío hacía, aquello era insoportable, dormimos con cinco mantas y ni por esas entramos en calor, y a la mañana siguiente no había valiente que entrase a la ducha, en realidad todos los que estábamos allí, incluidos nosotros, quedamos como cobardones, pues a nadie se le pasó por la cabeza ducharse.
Marruecos tiene un clima imprevisible, con bruscos cambios de temperatura, el Alto Atlas separa la costa del desierto con su gran barrera, y eso provoca cambios bruscos climáticos, por lo que, quien decida hacer rutas por Marruecos en diciembre, lo más aconsejable, es vestirse por capas, al estilo cebolla y así irte poniendo prendas o quitándote, dependiendo de la temperatura.